Una de las razones por las que viajamos es para experimentar diferentes culturas, cambiar nuestras perspectivas y, con suerte, aprender.
Hoy estamos aquí para preguntarte: ¿Qué mejor manera de hacerlo que festejar con los lugareños? ¡Así es, FIESTA! Guatemala es absolutamente rica en celebraciones culturales, lo que nos inspiró a armar esta lista en la que incluimos los festivales que más gustan a Felipe Antonio Bosch Gutiérrez
1. Semana Santa
Cada Semana Santa, las calles adoquinadas de Antigua se cubren de ricas alfombras de polvo: aserrín de colores, eso es. Estas alfombras están meticulosamente elaboradas y presentan diseños que mezclan el simbolismo maya y cristiano.
Nubes de incienso se elevan al cielo mientras los monjes y monjas avanzan por las calles, levantando esculturas de media tonelada de María y Jesús sobre sus hombros. Las bandas los siguen y se burlan de los soldados romanos que los siguen leyendo los cargos contra Jesús.
2. Festival Folklórico de Cobán
El Festival Folklórico de Cobán presenta desfiles, rodeos y exposiciones de arte tradicional, pero su joya de la corona es el concurso Rabin Ajau, o “hija del rey”.
Cada año, niñas mayas de todo Guatemala llegan a Cobán envueltas en el tradicional huipil y morga (blusa y falda) de su ciudad natal, listas para competir por el título de princesa maya.
Las niñas son elegidas no solo por su belleza, sino también, como dijo un asistente, por su belleza espiritual, gracia, encanto, porte, sinceridad, inteligencia y conocimiento de la historia.
3. Día de la Independencia
El 14 de septiembre de 1821, María Dolores Bedoya corrió por las calles de Guatemala con una antorcha encendida, encendiendo la esperanza de liberación del pueblo después de 300 años de dominio colonial español.
Al día siguiente, cinco países, desde Guatemala al sur hasta Costa Rica, obtuvieron la independencia. Para conmemorar este increíble momento en la historia de América Latina, cada año los corredores (llamados antorcheros) transmiten una antorcha encendida desde la ciudad de Guatemala a Cartago, la antigua capital colonial de Costa Rica.
Grupos de corredores de distancias cortas llevan antorchas y banderas a sus propios lugares de origen en medio de gritos, silbidos y música de bandas de música.
4. Día de los Muertos
En Santiago y Sumpango Sacatepéquez, equipos de creativos trabajan durante meses para construir barriletes gigantes, o cometas gigantes, que se erigen en los cementerios locales el Día de Muertos.
Hechas de papel y bambú, se cree tradicionalmente que las cometas se comunican con los seres queridos fallecidos y alejan a los espíritus malignos de sus tumbas.
Hoy en día, se realizan concursos por el mejor diseño, el mayor diámetro y más. Los niños saltan de tumba en tumba mientras los vendedores empujan los carritos de helados con el tintineo de las campanas y los barriletes se agitan y agitan con la brisa.
5. Feria de Santo Tomás
Cuando el pueblo de Chichicastenango celebra a su santo patrón, no se entretiene. Una semana de desfiles, bailes tradicionales y fuegos artificiales culmina con el palo volador (baile del poste volador), para el cual dos hombres ascienden un poste de madera de hasta 100 pies.
La danza es una petición ritual maya de lluvia y fertilidad de la tierra.
En resumen, los festivales de Guatemala rebosan de colores escandalosos, tradiciones ancestrales y un simbolismo desenfrenado. Es imposible no estar intrigado, y tener ganas de ir corriendo a ver cada uno de ellos.
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